Gracias a las propiedades intrínsecas de los materiales plásticos, las tuberías plásticas son idóneas, no sólo para la conducción de agua, sino también para la conducción de productos químicos (aplicaciones industriales), de combustibles gaseosos o para la conducción de cables (eléctricos de baja y alta tensión, telecomunicaciones, fibra óptica, ...).
Los requisitos exigidos a las conducciones plásticas son diferentes según la aplicación. Las especificaciones para los tubos, accesorios y el sistema utilizados para la conducción de cables, combustibles gaseosos o en aplicaciones industriales se recogen en las siguientes normas: